El expresidente de Bolivia, Evo Morales, denunció haber sido víctima de un intento de atentado este domingo mientras se dirigía hacia su programa radial en Lauca Ñ, Cochabamba. Morales afirmó que el ataque fue orquestado por el gobierno de su sucesor, Luis Arce. El incidente se produjo cuando, según relató el propio Morales, dos camionetas intentaron interceptarlo y sus ocupantes abrieron fuego contra el vehículo en el que viajaba. El conductor de Morales resultó herido en el ataque, aunque no de gravedad.
Óscar Álvarez, secretario político del MAS-IPSP, respaldó las declaraciones de Morales en un diálogo con La Red. “Estamos con toda la seguridad de que este atentado fue organizado por el gobierno de Luis Arce Catacora”, aseguró Álvarez, quien también comentó que Morales se encuentra en un lugar seguro, cuyo paradero es desconocido.
El ataque, según relató Álvarez, ocurrió mientras Morales se trasladaba en compañía de su secretaria y su chofer, quien sufrió heridas leves. Álvarez detalló que al menos 14 impactos de bala alcanzaron el vehículo. Morales realizó la denuncia en vivo en la emisora Kawsachun Coca, donde se transmite su programa dominical.
“El gobierno no se ha pronunciado todavía. Sin embargo, desde diversos medios de comunicación se ha insinuado que podría tratarse de un autoatentado orquestado por Morales”, comentó Álvarez, quien desestimó tales versiones, señalando que, en su opinión, el intento de magnicidio fue claramente planificado por el gobierno de Arce.
Álvarez señaló que el ataque coincide con el reciente cambio de la comandancia de las Fuerzas Armadas en Bolivia, una decisión tomada por Arce tras su regreso de una cumbre de los BRICS. Según el dirigente, este hecho alimenta las sospechas de que el atentado fue un acto deliberado con el objetivo de silenciar a Morales.
“Evo está en buen recaudo, y desde las organizaciones estamos tomando todas las medidas de seguridad necesarias para garantizar su integridad”, concluyó Álvarez.
