El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, disertó en el Foro Económico de Davos en un panel sobre deuda global. Estuvo junto al profesor de la Universidad de Harvard, Kenneth Rogoff, quien dijo estar "muy contento con lo que está pasando en la Argentina".
El funcionario argentino contó que el monto que la Argentina negocia en Nueva York "equivale a menos de 2 puntos del PBI. No es el juicio del siglo. Es un monto pequeño comparado con el aumento del 60% en la deuda en China en los últimos años".
Prat-Gay pidió que a la hora de ver a la Argentina se tengan en cuenta tres puntos:
– "Pongamos las cosas en contexto".
– "Pongamos nuestra oferta en la mesa. Lo haremos la semana próxima".
-"Queremos solucinar de un modo justo".Respecto a la coyuntura, el ministro señaló "Removimos una parte significativa de los obstáculos del mercado cambiario".
Prat Gay recordó que quienes participaron de los canjes de deuda de 2005 y de 2010 ya se llevaron el equivalente a 120 centavos por cada dólar, mientras que los holdouts están reclamando el equivalente a 350 centavos por dólar. "Por eso es que tenemos que ser claros con los números", dijo el ministro, quien insistió en que mientras que la demanda de los holdouts incluye 10 centavos en concepto de capital original, contempla cerca de 90 centavos en intereses.
Prat-Gay volvió a insistir con que no es real que en los canjes de deuda se haya hecho una quita de 75 centavos, como informó en su momento la gestión Kirchner, ni tampoco que los buitres estén reclamando 100 centavos. "Piden 350", subrayó.
Rogoff en la charla habló sobre la economía mundial. Ydijo que "el problema hoy está en los emergentes. En China no sabemos bien que está pasando pero está desacelerandose fuerte, la recesión de Brasil es la peor en 100 años. 2016 es un año duro para los mercados emergentes, no es un problema sistémico".
Prat-Gay respondió que el problema de la deuda en los países de la región hoy es diferente al de épocas pasadas porque ahora la deuda es más privada que pública y expresada en moneda local que extranjera. Por lo tanto las devaluaciones no generan un problema de balance de pagos como antes.
Fuente: Clarín