En un giro de ironía, el Gobierno respondió a las recientes críticas del ex presidente Mauricio Macri, quien ha cuestionado el rumbo institucional de la administración de Javier Milei. En una declaración que resonó en los medios, Macri mencionó que «hace tiempo se terminaron las milanesas», refiriéndose a las largas y amistosas conversaciones que mantenía con el actual presidente durante cenas en las que ambos compartían ese popular plato argentino.
Un funcionario de la Casa Rosada, al ser consultado por periodistas sobre las declaraciones de Macri, no dudó en lanzar un comentario sarcástico: «Puede llamar al Club de la Milanesa y le mandan una». Este comentario no solo busca desestimar las críticas del líder del PRO, sino también resaltar la tensión que existe entre ambos, especialmente en un contexto político en el que Macri y Milei parecen navegar una relación marcada por altibajos.
En sus últimas declaraciones, Macri ha manifestado su preocupación sobre la falta de apego institucional por parte del Gobierno, advirtiendo que esta situación podría comenzar a afectar negativamente el plan económico del país. Además, culpó al «entorno» del presidente Milei por no haber validado un enfoque más alineado con las normativas institucionales existentes.
El ex mandatario también reveló que durante sus encuentros en la Quinta de Olivos, Milei mostraba apertura a sus sugerencias sobre una mayor institucionalidad. Sin embargo, según Macri, los otros dos miembros del «triángulo de hierro» que rodean al presidente lo disuadían de seguir ese camino.
