Mientras algunos referentes del PJ, que solían aplaudir a Cristina Kirchner en los actos en la Casa Rosada durante sus mandatos, repiten como un mantra que el kirchnerismo es una etapa terminada, los hermanos Rodríguez Saá, críticos de las políticas del gobierno anterior, se acercan cada vez más a la ex presidenta.
El gobernador de San Luis y la ex jefa del Estado se reunieron el martes pasado en el Instituto Patria. Según pudo saber LA NACION, coincidieron en rechazar las medidas de la administración de Cambiemos. Hablaron de los "ajustes", aumentos de tarifas y "carpetazos judiciales". ¿Exploraron un eventual acuerdo electoral? "Por ahora solo coincidencias en disentir con Macri", dijeron colaboradores del puntano.
Nicolás Rodríguez Saá es uno de los interlocutores del gobernador puntano y el senador peronista con los sectores duros del Frente para la Victoria. Es abogado y milita en la Juventud Peronista, que lidera el intendente de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini. En febrero, Alberto lo designó como director de la Casa de San Luis en la Captal.
En su perfil de la red social Twitter del "primo segundo" de los Rodríguez Saá abundan las fotos con referentes del kirchnerismo. Subió imágenes junto al ex jefe de la Agencia Federal de Inteligencia Oscar Parrill ; el jefe de La Cámpora,Máximo Kirchner ; la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala y el ex secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno , entre otros dirigentes. También se retrató con la ex presidenta durante un acto en Balcarce 50.
Nicolás, hijo de Umberto Rodríguez Saá, ex gobernador de San Luis, asegura que las políticas de Cambiemos los empujan a Alberto y Adolfo a buscar la unidad del peronismo, sin excluir a la ex mandataria. "El encuentro con los militantes o movimientos del campo social y popular se da de forma natural porque Macri, en vez de unir a los argentinos, profundizó la grieta", señala a LA NACION.
El primo de los Rodríguez Saá no cree que la mayoría de los gobernadores del PJ se resista a incluir a Cristina Kirchner en la discusión por la unidad del peronismo. "Alberto habla con muchos gobernadores y no es así como dicen. Él es consciente de que no tiene deuda, que no lo pueden apretar con la chequera. Puede actuar con libertad y tiene un modelo de provincia ejemplar. Muchos gobernadores lo toman a Alberto como un faro de consulta", remarca.
El director de la Casa de San Luis es optimista sobre el futuro del PJ, que transita un engorroso proceso de renovación tras el revés electoral de 2015. "El peronismo es sabio y se va a reagrupar -sostiene-. Está en ese camino y el motor de esa unidad es el propio presidente Macri".
Rechaza, además, que el acercamiento del mandatario puntano a Cristina sea consecuencia del enfrentamiento político de los hermanos Rodríguez Saá con el opositor Claudio Poggi , quien aspira a disputarles el poder provincial en los próximos comicios. "No piensan en lo chiquito ni en lo local, sino en dejarles una patria más libre y con mayores posibilidades a sus hijos. Con la gestión que tienen en San Luis no les hace falta ningún gesto para revalidarse en la provincia", remarca.
Para Nicolás Rodríguez Saá, el gobernador de San Luis y el senador "están tratando de unir el peronismo porque entienden que toda la Argentina va a pagar las consecuencias del endeudamiento brutal" que provocó Macri.
El acercamiento a Cristina
Alberto Rodríguez Saá afianza sus lazos con el kirchnerismo desde hace meses. Al igual que su hermano, fue crítico de las políticas de Néstor y Cristina Kirchner. Pero con la llegada de Mauricio Macri a la Casa Rosada, decidió acercarse a la ex presidenta y su entorno. "Por supuesto que quiero unirme a Cristina", declaró en febrero pasado en una entrevista radial.
En el último tiempo, mantuvo reuniones con Parrilli en el Instituto Patria -donde expondrá este jueves sobre su decisión de recibir a refugiados sirios en San Luis-, dijo que Cristina era víctima de una persecución judicial y visitó en nochebuena a Milagro Sala en la cárcel de Alto Comedero, en Jujuy. Días atrás, se mostró con el titular de Suteba, Roberto Baradel , en pleno conflicto de la gestión de Cambiemos con los gremios docentes.
Nicolás defiende el sorpresivo cambio de postura de los Rodríguez Saá y arremete contra Macri: "Está profundizando la grieta con ajuste y represión". "Alberto fue a visitar a Milagro Sala a la cárcel como fue en los noventa a ver [Enrique] Gorriarán Merlo. Además, fue de los primeros opositores al neoliberalismo de Menem", recuerda.
"No es que de repente se convirtió en kirchnerista. Entiende que hay que ofrecerle a la ciudadanía una alternativa amplia construyendo mayorías siendo tolerantes", concluye.
Fuente: La Nación