
El Sindicato que nuclea a las y los trabajadores de la Educación, continúa negociando con el Gobierno provincial por una mejora salarial para el sector, y esperan una propuesta oficial en los próximos días.
Según informó Ignacio Colina, referente del gremio, las conversaciones vienen desarrollándose desde mediados de mayo y se ha planteado un pedido concreto: un incremento del sueldo básico o, en su defecto, una suma fija remunerativa no bonificable.
«Nosotros venimos trabajando el tema salarial desde mediados de mayo. Hemos propuesto a las autoridades ministeriales que el incremento sea al básico, y en caso de que no pueda darse en esos términos, que sea una cifra remunerativa no bonificable, fija para todos los docentes de la provincia», explicó Colina.
Desde el sindicato solicitaron un aumento estimado entre el 30% y el 40%, un porcentaje que, según destacaron, responde al atraso del salario docente en relación con la inflación. “Quizás parezca mucho, pero teniendo en cuenta que el básico en la provincia para un cargo testigo es de $308.405, creemos que no es tanto el incremento que estamos solicitando”, señaló.
El gremio espera que la propuesta formal del Gobierno llegue la próxima semana y se aplique a los haberes de julio. “Ni bien la tengamos, la vamos a bajar a nuestros delegados y delegadas para analizarla y en función de ello tomaremos una decisión”, adelantó Colina.
La negociación se da en un contexto de creciente presión sindical por una recomposición salarial que logre compensar la pérdida del poder adquisitivo. Desde el SELaR se mostraron dispuestos al diálogo, pero firmes en su postura de alcanzar un acuerdo justo para el conjunto de los trabajadores de la educación.