El ex ministro de Planificación del kirchnerismo Julio De Vido transita unas semanas de tensión, tras sentarse en el banquillo de los acusados. El diputado está convencido de que el gobierno está detrás de su imputación y responsabilizó al presidente Mauricio Macri por ello, al considerar que "busca sin descanso" vincularlo con el caso Odebrecht.
Ayer el juez federal Daniel Rafecascitó al ex ministro de Planificación a indagatoria el 5 de diciembre por negociaciones incompatibles con la función pública en una de las causas que investiga coimas por parte de la constructora brasileña Odebrecht. De Vido sostuvo que el magistrado sospecha que es partícipe "de un delito por haber firmado la Resolución 185/2004, que reglamenta el Decreto 180/2004" del fallecido ex presidente Néstor Kirchner.
Además de intentar deslindarse de responsabilidades, De Vido dijo desde su cuenta de Twitter: "Hace 1 año y casi 10 meses que Macri busca sin descanso vincularme a su socio Odebrecht". Y añadió: "Con la ayuda de su amigo, (ex) jefe de seguridad de Boca, el fiscal Carlos Stornelli, me armaron una causa".
De Vido cuestionó las consideraciones del juez al señalar que según la resolución "parece que un interesado en ofertar (Roggio que por lo visto ni siquiera era todavía oferente), pidió plazo a la Secretaria de Energía para buscar un banco (parece que mexicano), que lo financie. Energía le dio 5 días pero como a otro interesado (Odebrecht que todavía no era oferente), le dio 60 días aparentemente sobre un financiamiento bancario ya acordado".
"La conclusión es que De Vido es sospechoso de negociaciones incompatibles con la función pública porque reglamentó un decreto del PEN y estableció un procedimiento para la ampliación de gasoductos", argumentó el ex ministro.
Según el fallo de Rafecas, conocido ayer, se sospecha que De Vido creó el marco normativo necesario para que, desde la Secretaría de Energía, en negociación con Odebrecht, se procediera al llamado a "licitación privada" a través de las empresas licenciatarias Transportadora de Gas del Norte (TGN) y Transportadora de Gas del Sur (TGS), pero como esas firmas se negaron a hacerlo fue convocada CAMMESA (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico) que, en un proceso con irregularidades, delegó en Odebrecht el negocio.
Fuente: Agencia DyN