“En Argentina en los hospitales públicos las cesáreas ronda un 35% y en las privadas 75, 80% cuando la recomendación es no más del 15%”, dijo Yanina Dossetto, Doula y Puericultora. Co- fundadora de la Asociación Civil Doulas Comunitarias y AmarUtera Formación de Doulas.
“Parir con salud, es parir sin violencia” será el lema de este año para la prevención de la violencia obstétrica e institucional y que se conoció durante la semana mundial del Parto Respetado que se conmemora del 14 al 20 de mayo. Durante toda esta semana se realizaron actividades en todo el país para visibilizar los derechos de las personas gestantes y personas recién nacidas, durante los procesos de gestación, nacimiento y postparto, respetando los tiempos, deseos y expectativas de las personas y de prevención de la violencia obstétrica e institucional.
“Cuando hablamos de violencia en el parto y nacimiento nos referimos a los actos invisibles y naturalizados que ocurren en las salas de partos e incluso antes, en las consultas gineco-obstétricas. Prácticas abusivas y muchas veces (la mayoría) innecesarias que se realizan por conveniencia del sistema médico, poniendo en peligro la salud tanto de la mujer que paren como el niñx que nace”, dijo Yanina Dossetto, Doula y Puericultora. Co- fundadora de la Asociación Civil Doulas Comunitarias y AmarUtera Formación de Doulas a La Red La Rioja.
Entre esas prácticas mencionó “el desinterés por brindar información o brindar información errónea en las consultas pre parto por parte del profesional, administración de oxitocina sintética en el momento del parto, rotura artificial de bolsa, episiotomías, dilatación manual, posición acostada para parir, impedimento del consumo de alimentos y bebidas en el preparto o del movimiento, separación de la mamá y bebé al momento del nacimiento, no respetar la hora de oro, el corte tardío del cordón”. Y agregó que “son algunas prácticas que ocurren sistemáticamente en las instituciones públicas y privadas, prácticas que naturalizamos y que corresponde a la violencia obstétrica. Si bien hay una ley que habla del tema que es la Ley 25929 del Parto Humanizado y otras leyes que indirectamente tocan el tema que son la Ley del Derecho del paciente La Ley 26.529 y La ley 26.485, de Protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres, lamentablemente no se cumplen y estas prácticas (naturalizadas e invisibilizadas) siguen ocurriendo y las mujeres y personas gestantes tampoco denuncian ya que muchas veces no son escuchadas y re victimizadas.
“Cuando hablamos de violencia en el parto y nacimiento nos referimos a los actos invisibles y naturalizados que ocurren en las salas de partos e incluso antes, en las consultas gineco-obstétricas. Prácticas abusivas y muchas veces (la mayoría) innecesarias que se realizan por conveniencia del sistema médico, poniendo en peligro la salud tanto de la mujer que paren como el niñx que nace”,
Denunciar, anoticiar
La Ley Nacional, la 25.929 de parto respetado garantiza un parto normal, que se respete los tiempos, la no discriminación y el respeto por la intimidad y poder elegir a la personas que acompañará durante el trabajo de parto, el parto y el posparto. También que el o la bebé esté en su cuna en la habitación durante la internación (a menos que necesite cuidados especiales), contar con la información necesaria, en un lenguaje claro, sobre el estado y la evolución del parto y del bebé, conocer beneficios de amamantar y los cuidados necesarios u los efectos negativos del tabaco, el alcohol y las drogas.
“La Ley de Parto Humanizado, entre otras cosas, habla de la información que se le debe dar a la persona gestante sobre los procesos en cada momento que lo solicite, no solo de los procedimientos que les vayan a hacer sino también sobre la lactancia y cuidados del recién nacidx. Esto es muy importante porque tanto en la gestación, parto y puerperio la información es fundamental para tomar decisiones. Algunas de las decisiones son por ejemplo querer o no amamantar o programar un nacimiento por cesárea”, explicó a la especialista.
Ante el incumplimiento de la normativa vigente se puede hacer denuncias y exponer la situación de violencia obstétrica e institucional. “En cuanto a las denuncias, a nivel nacional se puede hacer un reclamo administrativo ante la Comisión Nacional Coordinadora de Acciones para la Elaboración de Sanciones de la Violencia de Genero (CONSAVIG) correo electrónico consavig@jus.gov.ar. El trámite es gratuito. Además, podes contactarte con el INADI o la Defensoría del Pueblo y para asesoramiento están las líneas 0800 – 122 – 5878 o 144. y el La Rioja se pueden acercar a la Secretaria de la Mujer y Diversidad”, mencionó.
Las cesáreas
Consultada sobre si tanto en el sistema público como privado existe un “abuso” de las césareas respondió que “este tipo de nacimiento corresponde a una cirugía mayor donde tanto la mujer como el bebé son sometidas a intervenciones que supone riesgos para la salud por lo tanto deberían hacerse solo cuando es necesario”.
Mencionó entonces datos alarman: “En Argentina en los hospitales públicos ronda un 35% y en las privadas 75, 80% cuando la recomendación es no más del 15%”. “Esto se debe a la falta de información de las familias, la conveniencia de algunos profesionales y las malas experiencias de partos anteriores por haber sufrido violencia obstétrica. Como vemos la información siempre está presente. Informarse sobre el proceso de la gestación, parto, puerperio y lactancia es fundamental para hacer las preguntas correctas a lxs profesionales, para poder elegir lo que es mejor para nuestro cuerpo y para nuestro hijx y sobre todo para poder corrernos de los lugares donde no nos sentimos cómodas en este periodo tan importante y transcendental de nuestras vidas”.
“La Ley de Parto Humanizado, entre otras cosas, habla de la información que se le debe dar a la persona gestante sobre los procesos en cada momento que lo solicite, no solo de los procedimientos que les vayan a hacer sino también sobre la lactancia y cuidados del recién nacidx. Esto es muy importante porque tanto en la gestación, parto y puerperio la información es fundamental para tomar decisiones. Algunas de las decisiones son por ejemplo querer o no amamantar o programar un nacimiento por cesárea”, explicó a la especialista.
El rol de las doulas y la experiencia en el sistema público de salud
En Argentina, hay un solo hospital público que tiene presencia de doulas voluntarias en su centro obstétrico y que atiende de lunes de 08:00 a 20:00 hs, a través de la Asociación Civil Doulas Comunitarias. “Desde hace 11 años, mujeres con ambos lilas que le dan la bienvenida las futuras madres y padres, lxs acompañan con música, masajes, aromas ricos y escucha al ingreso a la guardia, luego en la sala de partos y posteriormente en la sala de recuperación. Asistiendo en lo que necesite la mujer y sobre todo en el inicio de la lactancia”, contó Dossetto sobre esta experiencia en el sistema público de salud.
Contó, en este sentido, que “el rol fundamental es el acompañamiento emocional”. “Las doulas no somos médicas, no podemos intervenir ni aconsejar sobre prácticas médicas. Acompañamos con miradas, información, contacto y sobre todo escucha. Las doulas en el hospital no solo son sostén emocional para las madres sino también para el personal médico, acompañando con una mirada o palabra de aliento cuando el cansancio de las largas horas de guardia se ven en sus cuerpos. Ser voluntaria es una tarea noble, poner el cuerpo y la emoción al servicio del otre es muy reconfortante. Acompañar a las mujeres en el momento más importante de sus vidas nos honra. En el hospital cuando están las Doulas reina el silencio, los aromas, la música suave. Hay armonía. Y eso lo fuimos logrando a través de los años. Sin perder nuestro eje que es el bienestar de la mujer y él bebe”.
Y para el acompañamiento en la lactancia están las puericultoras: “somos profesionales que acompañamos a las familias en la lactancia y crianza. Acompañamos con información y herramientas técnicas que favorecen la práctica desde el inicio hasta el destete. El rol de la puericultora muchas veces excede la lactancia cuando se presentan situaciones tales como la llegada de un hermanitx, o cuando se presenta alguna dificultad en él bebe como enfermedades, etc.”, afirmó.