El Gobierno definió elevar los impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), que se traslada directo al precio del litro de nafta y gasoil a partir de este sábado 1° de junio, pero en etapas.
Mediante el decreto 466, publicado este martes en el Boletín Oficial que lleva las firmas del presidente Javier Milei, el exjefe de Gabinete, Nicolás Posse y el ministro de Economía, Luis Caputo, el Ejecutivo estableció un nuevo cronograma para subir los impuestos fijados para los combustibles virgen. De esta manera, entre el 1 y el 30 de junio se aplicarán las subas a esos tributos por el cuarto trimestre de 2023 y al primer trimestre de este año.
Esta suba había sido postergada a comienzos de mayo por la administración nacional para sacarle presión al dato de inflación.
Para tomar como referencia en la provincia, se estima que el litro de nafta va a subir un 20%, promedio, en la Ciudad de Buenos Aires, mientras que el gasoil lo haría por encima del 11%.