Montivero, otra Estrella Blanca que se apaga

Falleció este lunes Hugo Osvaldo Montivero. Tenía 84 años.

Otra estrella que se apaga y nos deja el recuerdo de su brillo. Este lunes, a los 84 años, Hugo Osvaldo Montivero, integrante de aquel fantástico equipo de básquetbol de Juniors conocido como Las Estrellas Blancas, murió a los 84 años.

“El Moncho” había nacido en La Rioja el 20 de octubre de 1937 y llegó a Córdoba en 1962, para incorporarse a ese auténtico Dream Team que comenzaba a armar el soñador dirigente albo Luis Miguel Isaía. Provenía del club riojano, después de haberse formado desde “mosquito” en Amancay, en su provincia natal.

A esa altura, ya había ganado consideración nacional gracias a su participación en cinco Campeonatos Argentinos con la selección riojana, a la que sumó su aporte desde 1955. También representó a Córdoba en los torneos de 1966 y 1967.

En Juniors debutó a toda orquesta el 24 de julio de 1962, ante Universitario, en un cuadrangular jugado en el desaparecido Córdoba Sport y del que también tomaron parte Atenas y Barrio Observatorio. Esa noche, “Moncho” se despachó con 23 puntos, siendo el segundo goleador de la jornada, sólo superado por Gustavo Chazarreta (25), por entonces rival y jugador de la “U”, que ganó el juego 55-49. Montivero aportó casi la mitad de los puntos de su equipo.

El 28 de agosto de 1965 se despachó con su mejor registro en los albos, al anotar 36 puntos ante Talleres, en un partido en que los suyos vencieron 96-49 por el Preparación. Eran, claro está, épocas en que no existían los triples y todas las anotaciones de campo valían dos puntos.

Participó de las presentaciones de Juniors en el mítico Luna Park de Buenos Aires, fue múltiple campeón en los torneos locales y también formó parte del doble histórico triunfo sobre la poderosa selección de Bahía Blanca (82-81 y 91-79 en agosto de 1965).

Retirado de la actividad, nunca abandonó el básquetbol, su gran pasión, y se desempeñó como dirigente y presidente de la Federación Riojana, fue parte del comité organizativo del Mundial ‘90, realizado en nuestro país, y también se dedicó a la conducción técnica. Hugo, uno de sus hijos, heredó el gusto por el deporte y es un reconocido periodista y comentarista de básquetbol a nivel nacional.

Sus restos serán velados este martes, de 9 a 13, en la casa mortuoria sita en Bulevar San Juan 537, para luego trasladarlos al Parque Azul, camino Alta Gracia, su última morada.


Fuente: La Voz.