Lenguaje Inclusivo en las escuelas: ¿Cómo impacta la medida del Gobierno Bonaerense?

Ni x, ni e, ni @. El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires prohibió el uso del lenguaje inclusivo en las aulas. El debate estalló a nivel nacional, y muchas posturas, tanto a favor como en contra, se posicionaron. Para reflexionar sobre esto, La Red dialogó con la coordinadora de ESI en La Rioja, Victoria Estrada.

La semana pasada, el Gobierno de Buenos Aires fue noticia a nivel nacional por una resolución que emitió a través del Ministerio de Educación, donde prohibió el uso de la e, x, @, etc. por parte de docentes en las escuelas para diferencias género. El objetivo de la medida es facilitar el proceso de aprendizaje de los estudiantes; ante esto, Horacio Rodríguez Larreta, Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, explicó que su intención es simplificar la forma en que aprenden los chicos: “Estamos convencidos de que para promover el aprendizaje a leer y escribir tienen que dominar las normas del idioma español tal cual es”, dijo el funcionario.

En este sentido, los docentes tienen prohibido usar la e, la x o el @ dentro de las aulas. Ya no podrán utilizar palabras como “chiques” o escribir “todxs” frente a las y los alumnos.

La utilización del lenguaje inclusivo comenzó a practicarse hace algunos años con la intención de incluir a identidades de género reconocidas por la legislación argentina tanto con la Ley de Identidad de género como el Decreto de DNI no Binario. Desde entonces, esta forma de comunicarse y expresarse causó polémica y profundos debates en torno a nuestros usos y prácticas lingüísticas. Sin embargo, es la primera vez que un Gobierno toma una decisión de esta envergadura.

Para reflexionar sobre la medida del Gobierno de Buenos Aires- la cual es pionera a nivel país- Radio La Red dialogó con la referente de ESI en La Rioja, Victoria Estrada, quien se mostró disconforme con la resolución: “Es un retroceso en materia de política publica y educativa, porque es evidente que el lenguaje transforma y la sociedad transforma al lenguaje”, arguyó, y recalcó: “Legislar sobre la prohibición es antidemocrático, sobre todo en un país avanzado en DDHH como Argentina”.


Además, la funcionaria explicó que la utilización del lenguaje inclusivo no fue impuesta en ámbitos políticos ni educativos: “La idea es permitirlo y respetarlo, pero nunca se habla de una cuestión de imposición”, sumó.

“El pronunciamiento del lenguaje inclusivo, en cualquiera de sus formas, es político, en identidades que históricamente fueron silenciadas”, expresó Estrada.

Desde que comenzó a utilizarse el lenguaje inclusivo, hubo un gran rechazo por parte de sectores de la sociedad que, basándose en instituciones como la RAE, negaban la práctica. Sin embargo, cada vez se podía observar en mayor escala en los ámbitos educativos, tanto primarios como secundarios, utilizados por docentes y alumnos.

En torno a esto, Estrada reflexionó, y dijo que: “Me surgen varias preguntas sobre cómo va a hacer el gobierno de Buenos Aires para prohibir efectivamente el uso de lenguaje inclusivo, es decir, qué medidas punitivitas se implementarán ante su uso, y eso me parece lamentable, porque atenta contra la libertad de expresión y toda la lucha de las conquistas en torno a las identidades de género”.

La referente de ESI fue más allá, y se preguntó: “¿Qué intentan prohibir cuando se regulan estos usos de la lengua? Claramente es una política de cancelación


 

Lenguaje Inclusivo, su impacto en las escuelas y la diversidad

Estrada explicó que comenzó a utilizarse y a pensarse al lenguaje inclusivo en los ámbitos educativos riojanos como distintas formas de construir el lenguaje: “Esto claramente está sucediendo, y se está adoptando por las juventudes que se sienten identificadas e identificados con un lenguaje inclusivo que justamente es un pronunciamiento político que quiere ir en contra de la cancelación histórica de las identidades”.

En cuanto a esto, la coordinadora de ESI dijo que la Educación Sexual Integral- La cual es ley nacional desde el 2006- tiene cinco ejes fundamentales, y uno de ellos es el respeto por la diversidad: “No solo tiene que ver con las distintas orientaciones o identidades de género, sino que también tiene que ver con la diversidad en todo tipo de configuraciones: familiares, corporales, étnicas, raciales”. Es uno de los ejes mas fuertes de la ESI y busca, entre otras cosas, reconocer la perspectiva de género.

La coordinadora explicó que esto impacta positivamente en los y las niñas: “Son infancias libres, crecen reconociendo el respeto a sus identidades en un marco de acompañar y respetar su sentir y su hacer”, dijo.

“Esto les da la libertad de saber que podes ser nombrado, nombrada o nombrade de la forma en que sientas”, sumó.