En la tarde del jueves se pudo conocer que el área de Asuntos Internos de la Policía estaba citando a más de una docena de cadetes, que fueron testigos del entrenamiento que le costó la vista a Garay, para tomar su declaración testimonial.
Por esto, este viernes el juez Mario Martínez decidió interponer una acción judicial para bloquear y suspender las citaciones a los testigos, ya que se teme que los persuadan y cambien su versión ante el Juzgado de Instrucción Nº1 donde se tramita la causa.
A esto se suma el malestar de la familia Garay por esta decisión policial. De hecho, su hermano Adrian Garay salió con los tapones de punta.
“Cuesta creer. Asuntos Internos de la Policía está llamando a los cadetes a declaración testimonial, antes de que declaren ante el Juez. Ósea, esta llevando un investigación paralela a la del Juez. Es algo gravisimo”, escribió en su Facebook personal.