Antes del debate por la ley antidespidos, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto del Poder Ejecutivo que dispone la devolución de IVA para los jubilados, pensionados y beneficiarios de planes sociales, con el apoyo de oficialismo y oposición. Hubo 232 votos a favor, 7 abstenciones y ninguno en contra.
El proyecto, que ahora debe tratarse en el Senado, establece que del total de 21 por ciento que se paga de IVA los beneficiarios podrán recuperar 15 puntos porcentuales en las compras hechas con las tarjetas de débito con las que cobran sus haberes.
Cada beneficiario podrá recuperar como máximo 300 pesos por mes, lo que representa el 15 por ciento del valor estimado de una canasta básica. Según los cálculos del Gobierno, la medida podría representar un costo fiscal de 22.000 millones de pesos por año. Pero para eso los beneficiarios deberían hacer todas sus compras con tarjeta, algo difícil de cumplir por la gran cantidad de comercios que no cuentan con ese medio de pago. Fueron exceptuados de esa condición los habitantes de pueblos de menos de 5000 personas, donde ni suele haber bancos.
La discusión entre oficialismo y oposición se desató durante el tratamiento del articulado, por una propuesta del Bloque Justicialista para que el costo fiscal sea absorbido en su totalidad por la Nación y no por las provincias, pese a que el IVA es un impuesto coparticipable. A último momento, el Frente Renovador decidió apoyar la propuesta del justicialismo, que ya contaba con el respaldo del Frente para la Victoria (FPV). Del total de 22.000 millones de pesos, 10.000 se le descontarían a las provincias, según el proyecto original.
Fuente: La Nación