
Tras dos años sin funcionamiento, el comedor universitario volvió abrir sus puertas con una propuesta renovada. Marcos Colina, encargado destacó el impulso por parte del rectorado y el área de Extensión Universitaria y aseguró que la iniciativa busca brindar una solución concreta a las necesidades alimentarias de los estudiantes, especialmente aquellos provenientes del interior.
“La idea surgió como una propuesta que acercamos al rector y a Natalia Álvarez Gómez, con el objetivo de mejorar el servicio para los alumnos. Queremos que los chicos puedan acceder a un plato de comida a buen precio, sin necesidad de volver a sus casas”, explicó Colina.
El comedor ofrecerá un menú diario de lunes a viernes a un valor de $4.500, con opciones variadas cada día. El servicio estará disponible desde las 11:00 hasta las 16:00 para el almuerzo, y también permitirá a los estudiantes retirar su cena entre las 20:00 y las 21:00.
Aunque el proyecto tiene una gestión privada, se lleva adelante en articulación con el área de Extensión Universitaria, que desarrolló una plataforma digital para que los estudiantes puedan inscribirse diariamente. “Queremos asegurarnos de que nadie se quede sin su porción. A través del link que se les facilita, pueden anotarse y también consultar los menús del día”, detalló Colina.
«Con esta reapertura, la universidad busca fortalecer el acompañamiento a su comunidad estudiantil, garantizando una alimentación digna, accesible y organizada», cerró el referente.