Lentes de contacto: lo que debes saber

Además de ofrecer flexibilidad, comodidad, los lentes de contacto ayudan a corregir diversos trastornos de la vista, pero también su uso debe ser de forma responsable para evitar lesiones o infecciones oculares. Desde FUNDANOA brindan algunas recomendaciones que debes saber, si estas pensando usar lentes de contacto.

Las lentes de contacto (LC) son una excelente opción para reemplazar los anteojos, especialmente si la graduación es elevada, porque otorgan mejor visión y campo visual en aquellas personas que tiene miopía, astigmatismo o hipermetropía.

Son más cómodos  para la práctica de deportes y actividades de ocio, no se empañan ni resbalan, ofrecen un campo de visión ilimitado y permiten un look más natural.

También existen las LC de color, que son elegidas con fines cosméticos, sociales. Estas lentes pueden ser sin aumento o tener la graduación que necesita el paciente.

Las lentes de contacto están fabricadas de un material transparente que es excelentemente tolerado por el ojo. Tienen un tamaño que varía de 8 a 15 mm de diámetro, y su espesor es extremadamente delgado (menos de medio milímetro), y se apoyan en la superficie del ojo, la córnea.

Existen diferentes tipos de lentes de contacto, según el defecto visual, tolerancia y graduación del paciente. Luego de un estudio minucioso se determinará el modelo más adecuado para sus ojos que aseguren un confort ocular y visual durante el día.

¿Todas las personas pueden usar lentes de contacto?

Si bien las LC actuales son muy desarrolladas y biocompatibles para el ojo humano, no todas las personas son candidatas a usarlas.

Por ello, antes de otorgártelas, el contactólogo te realizará estudios fisiológicos, predisposición, adaptación y tolerancia para determinar si podés ser un usuario de LC. Luego te enseñará la técnica de cómo colocártelas y sacártelas, además de los cuidados de higiene y mantenimiento de las mismas.

¿Qué lente de contacto me conviene usar?

Luego del estudio refinado que te hará el contactólogo, él te dirá la mejor opción para tus ojos.

Existen variados modelos de LC con algunas diferencias que están relacionadas tanto con el confort visual como ocular.

Las LC flexibles gas permeable pueden usarse durante un año, con controles periódicos para limpieza y pulido. Son ideales para corregir astigmatismos y miopías elevadas.

Con respecto a las LC blandas hidrofílicas te recomendamos las descartables.

Hay descartables diarias, quincenales y bimestrales. Las ventajas de todas ellas es que no requieren mantenimiento, sólo la conservación en un líquido estéril y en un estuche adecuado. No debes prolongar el uso de las mismas más allá de la fecha de vencimiento.

Las LC descartables son muy utilizadas en la hipermetropía y miopía, como así también en el astigmatismo leve.

Recomendaciones: Lentes de contacto y el sueño

Si vas adormir con las lentes de contacto puestas asegúrate que el sueño no sea mayor de una hora. Al despertarte, lubrica inmediatamente tus ojos con alguna lágrima artificial.

No es nada aconsejable dormir toda la noche con las lentes de contacto puestas. Recuerda que durante el sueño las lágrimas disminuyen naturalmente, y esto provoca que las lentes se sequen, los ojos se ponen pastosos, y esto puede provocar que la cornea se lastime y, lo más grave aún, que se infecte.

Dormir con las LC puede tener consecuencias gravísimas (muchas personas han quedado ciegas por infección debido al uso indebido de las LC.

La piscina

No es aconsejable que te bañes con las lentes de contacto puestas, tanto en la ducha como en la piscina. El agua tiene microorganismos que pueden adherirse a la lente, y a partir de allí generar una infección ocular.

Las LC que puedes usar en la piscina son las  lentes de contacto descartables diarias (las One Day duran sólo 24 horas). Cuando salgas definitivamente de la piscina no olvides de descartarlas. Aun así, siempre usá antiparras herméticas.

No compartas las LC

Lávate bien las manos antes de manipularlas. Evita las uñas largas porque pueden dañar el borde de las LC. No uses agua corriente para llenar el estuche. No las mojes con saliva. Sácatelas inmediatamente aparezca dolor, irritación o alergia ocular. Mantén siempre el estuche limpio. Cambia el líquido del estuche diariamente. No las uses en deportes de choque. Si vas a usar maquillaje, colócate primero las LC, y extráelas antes de usar el desmaquillante. Si ese día hay viento, no las uses. Si llegas a tu casa por la tarde, y ya no piensas volver a salir, sácatelas y usa tus anteojos aéreos.  Si vas a realizar un viaje las LC pueden secarse por el aire acondicionado o calefacción, por eso lo mejor es que uses los anteojos. Usa sólo lo productos de conservación que te provea el contactólogo. Siempre lleva contigo el estuche con líquido limpio, además de un frasco con lágrimas artificiales.

"Me duele el ojo y veo borroso"

Si eres usuario de LC y tienes molestias, sensación de cuerpo extraño, dolor, ojo rojo, visión borrosa, secreción ocular o edema de párpados, sácate inmediatamente la LC y concurre urgentemente a la Guardia Oftalmológica para tu revisación. No olvides nunca que las infecciones por LC progresan muy rápido, y pueden ser muy graves si no se las detecta a tiempo.

Guardia de Fundanoa 3804202663, disponible las 24h.